Legalizar Las Drogas? Segunda Parte (II)

Por: Rafael Peña
www.baitoatv.com La Chercha en New York es un popular programa que un grupo de talentosos jóvenes baitoeros producen por Internet desde Brooklyn y es transmitido en vivo cada sábado comenzando a las 8 de la noche. Hace unos meses, recibí una llamada telefónica de mi especial amiga Cristina García, quien es miembro del equipo que hace posible dicho programa, para dejarme saber de una cordial invitación que se me hacía para estar presente como invitado al interesante espacio. Le expresé mi satisfacción por el honor y acordamos elegir mas luego la fecha de mi presentación. Días después (un sábado) otra especial amiga, Lisset Núñez también me llamó por teléfono para expresarme su alegría al saber que pronto yo estaría en el muy popular programa. Aprovechó Lisset para informarme que esa noche en que hablábamos, La Chercha en New york tenía una encuesta para que el público diera su opinión a través del teléfono acerca de si estaba o no de acuerdo con la legalización de la marihuana y que a ella le gustaría escuchar mi opinión al respecto. Le expliqué a Lisset que en mi caso particular veía no conveniente exponer mi punto de vista de esa manera porque tema tan profundo ameritan más tiempo para ser explicado. A ella si le manifesté en pocas palabras mi criterio en cuanto a cualquier cosa que siendo ilegal genere tanto dinero como las drogas. Traigo esto a colación, porque me interesa ir probando, desde el presente hasta el pasado, los años que vengo sosteniendo mi parecer en relación al tema que nos ocupa.
baitoaTV.com es indiscutiblemente el medio de información más importante que tenemos los baitoeros. Por eso, me atrevo asegurar que nuestra comunidad dentro y fuera de Baitoa sabe que hasta el día de hoy he contado con la anuencia de su dirección para tener acceso al mismo, a través de mis opiniones escritas. Lo mismo puedo decir de la pagina "Baitoa Primero" de la cuál me siento honrado de ser parte de su dirección. Esta página, en sus escasos mese de fundada ha llegado al corazón de los Baitoeros. Ante estos dos medios que sirven de puente entre nosotros y nuestra comunidad, deseo manifestar mi profundo agradecimiento por el trato que me han dispensado a lo largo de todo el tiempo que lleva nuestra relación. Les pido, además, que comprendan que el tema que estamos tratando, por su propia naturaleza requiere de un alto sentido de análisis. En primer lugar, deben pensar que es totalmente mía la responsabilidad por la exposición que hago de este problema que afecta no solo a nuestro país, sino; prácticamente a todo el mundo. En ese sentido, esta claro que no es mi intención tratar de comprometer a estas dos honorables fuentes de información con una idea que sustento desde antes de nuestra relación. Y más todavía, desde mucho tiempo antes de una considerable cantidad de Baitoeros haber nacido. En este punto, solo me resta decir a baitoaTV y a Baitoa Primero que espero contar con su paciencia, ya que para lograr la forma como deseo transmitir mi posición en cuanto a este importante tema, necesitare realizar varias entregas, porque aparte de no dejar un solo detalle que considere de importancia, debo asegurarme de cerrar la posibilidad a que alguna persona de manera malintencionada pretenda tergiversar el limpio propósito de mi ponencia. Dicho esto, vayamos ahora al grano. En los anos de la década del 1980, mamá, papá y yo, solíamos juntarnos un día de cada semana, con la intención de comentar y sacar conclusiones acerca de la situación del país y de todo el mundo. Así pasábamos dos y tres horas. En una ocasión en que hablábamos (1985) de una aparente riqueza que disfrutaba nuestro país en ese entonces, me correspondió a mi llevar la voz contante en cuanto al punto, considerándose que de los tres yo era el único que había acumulado experiencia en una sociedad más desarrollada que la nuestra. Después de darles una breve explicación en cuanto a lo falso de esa riqueza, les dije que se fijarán en la disminución del valor de nuestra moneda, que haría que la vida principalmente de quienes dependían de sueldos como ellos, se pondría color de hormiga (no paso mucho tiempo para que ellos comprobar mi acierto). Al final de esa conversación habiéndoles explicado la procedencia de esa falsa riqueza les hice el pronóstico de que algún día todas las drogas serían legalizadas. Mamá, casi muda por el asombro, exclamó; Rafito! Legalizar las drogas? Si mamá. Hasta la próxima, si Dios quiere.

LA VOZ OFICIAL DE BAITOA EN EL MUNDO